Thamnophis, el género de serpientes más reconocido en Europa, es conocido por su característico patrón de coloración a rayas. Estas serpientes son nativas del continente americano, desde Canadá hasta el norte de Argentina, y se encuentran en una amplia variedad de hábitats, incluyendo bosques, praderas y hábitats acuáticos. En términos de morfología, las serpientes del género Thamnophis generalmente miden entre 30 y 120 cm de largo y tienen una coloración que varía ampliamente, desde tonos verdes, marrones y negros hasta tonos anaranjados y amarillos. Su patrón de coloración a rayas es único y característico, lo que les permite ser fácilmente identificadas. Sus cabezas son redondeadas y tienen ojos con pupilas verticales que les permiten ver en entornos con poca luz. Las serpientes del género Thamnophis son carnívoras y se alimentan principalmente de pequeños mamíferos, como roedores y anfibios. También pueden comer pájaros, lagartos y peces. Son animales solitarios y nocturnos, y pasan la mayor parte de su tiempo escondidos en madrigueras, troncos podridos o debajo de la vegetación. En cuanto a su comportamiento, las serpientes del género Thamnophis son sedentarias y no son muy móviles. Cuando se sienten amenazadas, suelen escupir y morder a su agresor. También pueden inflar su cuello para asustar a sus posibles depredadores. En términos de reproducción, las hembras del género Thamnophis suelen poner entre 2 y 20 huevos en nidos hechos de hojarasca y materia orgánica en áreas húmedas. Los machos suelen luchar entre sí para ganarse el derecho de aparearse con la hembra. En conclusión, el género Thamnophis es reconocido en Europa por sus características morfológicas y de comportamiento. Estas serpientes son importantes en el equilibrio ecológico de sus respectivos hábitats y deben ser protegidas para garantizar su supervivencia.